Consejos básicos para el buen mantenimiento de la secadora

Para el correcto funcionamiento de su secadora hay ciertas recomendaciones que el fabricante hace llegar al cliente mediante un manual de usuario y su respectiva página web, las cuales deben seguirse para que su secadora funcione correctamente, no presente fallas por mala utilización o se deteriore o dañe por falta de mantenimiento preventivo.

Si usted sigue estas recomendaciones, podrá disfrutar de su útil secadora por mucho más tiempo, y en condiciones plenas de funcionamiento, ya que el fabricante garantiza una vida útil estimada para su producto, en base a pruebas de utilización que se han puesto en práctica antes de lanzar el artefacto eléctrico al mercado.

Dicho esto, vamos a detallar cuáles son las recomendaciones y consejos básicos para el buen mantenimiento de la secadora

1. Nunca, por ningún motivo, rocíe agua o cualquier producto solvente, químico o corrosivo directamente sobre la secadora con la intención de limpiarla, pues podría ocasionar sin querer daño en la superficie, una descarga eléctrica, que se decolore la cubierta o algún componente de etiquetado, también puede haber deformaciones de la superficie o incluso hasta una chispa o incendio.
2. Asegúrese de que cuando vaya a limpiar su secadora el cable de alimentación de electricidad esté desenchufado y haya transcurrido, por lo menos, una hora antes del desenchufe para poder limpiarla con toda seguridad.
3. Recuerde que, durante el ciclo de secado el panel de control, de la secadora o la puerta incluso pueden acumular humedad.
4. Limpie el intercambiador de calor por lo menos una vez al mes. Al limpiarlo tenga en cuenta que este intercambiador tiene piezas filosas, nunca lo limpie con las manos, hágalo con un cepillo suave o con su aspiradora. Recuerde siempre desconectar la secadora antes de hacerlo.
5. Como la secadora está por lo general en la zona de lavado, nunca coloque los productos que usa para lavar sobre su secadora, pues contienen sustancias químicas que pueden dañar severamente el panel de control. Si ocurre algún salpicado o chorreado por accidente límpielo inmediatamente con un paño húmedo a seco. De la misma forma, cuando vaya a limpiar la superficie de su secadora hágalo con un paño húmedo a seco solamente, sin ningún tipo de producto de limpieza o abrasivo. Si tiene que verter productos de lavado es preferible que lo haga lejos de la secadora.
6. Para poder limpiar el tambor interno de acero inoxidable de la secadora use un paño húmedo con un limpiador suave y no corrosivo. En el mercado hay productos especiales para la limpieza de piezas de acero inoxidable que pudiera usar.

Una vez que lo haya limpiado retire con un paño húmedo cualquier residuo de este producto del tambor y luego pásele un paño completamente seco, así el tambor quedará perfectamente higienizado.

7. El acabado exterior de su secadora tiene un acabado brillante que la hace más reluciente, jamás utilice objetos cortantes sobre ella ni esponjas de alambre o abrasivas. Limpie este acabado con un paño suave humedecido. Jamás coloque cestas de lavado o paquetes con detergente sobre la cubierta superior de su secadora, y por ningún motivo coloque objetos pesados sobre ella que puedan deformarla.
8. La secadora tiene un depósito para agua condensada, para extraerlo tire de él con ambas manos y firmeza, cuidando de no derramar el agua. Como es pesado tenga cuidado de no lesionar su muñeca. Una vez extraído el depósito, vacíelo por un agujero que tiene con calma y recuerde que esta operación hay que hacerla después de cada secado.

Si no se hace después de cada secado, pueden producirse fugas de agua dentro de la secadora. Una luz led en el panel de control le indica que el depósito está lleno, cuando usted lo vacía, puede pulsar el botón inicio/ pausa y este aviso se apagará.

9. Para la limpieza del filtro intercambiador de calor, con una llave o una moneda abra la tapa de donde se encuentra el filtro. Este tiene dos fijadores, uno a cada lado, que lo mantienen fijo al equipo. Muévalos en la dirección que indica y extraiga el filtro.

Si el filtro se encuentra sucio o lleno de pelusas, una luz en el panel de control le avisará para que lo lave. Al lavarlo asegúrese de que ninguna partícula queda en el filtro. Dentro del contenedor hay una esponja que es la que debe lavar, luego la mallita del contenedor puede limpiarla con un cepillo suave cuidando de no romperla, y termine secando todo perfectamente.

Esta limpieza debe hacerse cada dos ciclos de secado por norma, coloque la esponja y el filtro en su lugar. Si al insertarlo la luz del panel parpadea debe sacarlo y revisar que ninguna partícula haya quedado dentro. Cerciórese de que al insertar el dispositivo quede asegurado con los retenes, uno de cada lado de manera correcta.

10. Como la secadora usa el aire interior de la habitación en la que se encuentre para hacerlo pasar por el calentador y así secar la ropa. Si usted deja productos químicos que emitan olores o vapores en esta habitación, su ropa adsorberá estos olores, así que procure mantener aireada y ventilada la habitación en donde esté instalada la secadora. Para mejor funcionamiento, si es posible, mantener un filtro de aire en la habitación sería lo ideal.
11. Procure poner siempre en la secadora la carga de ropa completa que indica el manual, ya que el colocar poca o mucha hacen que no funcione correctamente, lo que largo plazo trae consecuencias.
12. Con las prendas que generan mucha pelusa como cobijas, mantas, toallas, batas de baño, sería recomendable limpiar el intercambiador de pelusa antes de cada ciclo.
13. Revise bien los bolsillos de sus prendas de vestir, para que no haya ninguna moneda u objeto que dañe el tambor de secado.
14. Procure siempre colocar el ciclo que corresponde a determinado tipo de prendas, por ejemplo, si va a secar ropa pesada debe ser un ciclo para esta clase de ropa específicamente, ya que si lo hace en un ciclo ligero no quedará seca.

Esperamos que estos CONSEJOS BÁSICOS PARA EL MANTENIMIENTO DE LA SECADORA le sean de utilidad en el cuidado de su electrodoméstico preferido, especialmente en invierno.